Somos un colectivo en el que estamos nucleadas mujeres judiciales de todo el país comprometidas con el desarrollo humano y con la defensa de los derechos humanos, también se asocian a nosotras aquellas personas con trayectoria en la defensa de los Derechos Humanos. Y por ello, propiciamos como necesario consolidar relaciones sociales más democráticas e inclusivas, que avancen hacia el fortalecimiento de una cultura de la paz. Este objetivo fue tomado inicialmente por integrantes de los poderes judiciales, y nos constituimos como asociación civil desde la ciudad de Rosario, con proyección a todo el país. Queremos difundir ideas constructivas que se proyecten a los poderes judiciales, con el propósito de incidir en la sociedad.
Esta Asociación parte de reconocer la valía de la experiencia de las mujeres en cuanto al modo de relacionarse y actuar en el mundo y en la sociedad. Y que en el ámbito del servicio de justicia se exterioriza también en el modo en que se asume el desempeño funcional por parte de las mujeres. Mujeres de la justicia que entiendan al poder no como algo que se ejerce sobre los demás sino “para las y los demás”. Es decir para toda comunidad. Por lo que, esta asociación tendría como objeto:
1. Propender al respeto de los derechos humanos, particularmente de las mujeres; impulsando su empoderamiento para contribuir a consolidar una cultura de la paz, la legalidad, fortaleciendo el Estado de Derecho.
2. Propender a desarrollar una cultura crítica para prevenir y erradicar prácticas discriminatorias, de cualquier orden, que pudieran afectar el desempeño de las y los integrantes del servicio de justicia en su vinculación recíproca y respecto de la ciudadania.
3. Promover las acciones tendientes a garantizar el acceso a justicia de la población en general y de los sectores vulnerables y desfavorecidos, y en particular de las personas con discapacidad, en pos de una mejor administración y equidad del sistema judicial en su conjunto.
4. Promover el empoderamiento de las mujeres para la consecución de una cultura democrática, y en pos de la deconstrucción de los procesos que conducen a conductas y respuestas violentas en los individuos y en la sociedad, para el fortalecimiento de la paz y la igualdad.
5. Promover el desarrollo de las potencialidades y capacidades de todos y todas los integrantes del servicio de justicia, y propender al trato equitativo a las mujeres en el acceso a los cargos y demás funciones del servicio de justicia.
6. Colaborar y asistir a todas y todos las/os integrantes del servicio de justicia en situaciones criticas derivadas o vinculadas al ejercicio de sus funciones.
7. Propender a la democratización de las relaciones personales, promocionando prácticas equitativas y de respeto entre todos/as la/os integrantes del servicio de justicia.
8. Propiciar redes de integración y de apoyo entre mujeres a nivel provincial, nacional e internacional, para fortalecer la cultura de la paz, la justicia y la igualdad real.